El matrimonio Arnolfini: ¿un tributo a la memoria de la amada?
Por Flor J.
El retrato de los Arnolfini es una de las obras más exquisitas en cuanto a su técnica y también, una de las más misteriosas en la Historia del Arte. Esto es dada la iconografía y simbolismo que posee que ha incentivado múltiples teorías. Sin embargo, aquí tendré que hacer un paréntesis obligado; pues como historiadora del arte, te enseñan a «tratar todo con pincitas», es decir, a tener cuidado con todas las nuevas lecturas e investigaciones –por más interesantes y emocionantes que parezcan-, acerca de las obras. Sobre todo después de lo que ha sucedido con la Monalisa (teorías iluminati, que si sonríe o no o si es Leo en drag). No obstante, tardíamente (muy tardíamente), me encontré con una teoría de Margaret Koster, que me fascinó, sobre esta obra del Norte de Europa. Pero antes de llegar a ella, demos un poco de contexto:

“El retrato de Arnolifini y su esposa”, hoy ubicado en la National Gallery de Inglaterra, fue pintado por el gran maestro flamenco Jan Van Eyck. La pintura está hecha al óleo sobre madera y muestra a dos figuras al centro de una habitación. Por trabajos documentales, se sabe que el de la izquierda es (posiblemente) Giovanni Arnolfini y la de la derecha es (posiblemente) Giovanna Cenami. Ambos personajes son de origen italiano asentados en la ciudad de Brujas (Bélgica) y pertenecientes al creciente estrato de comerciantes ricos en la Europa Septentrional del siglo XV. La habitación en donde se encuentran es una alcoba; al fondo, en la pared, cuelga un un espejo que refleja la escena y probablemente, al mismo artista y de ahí la anotación sobre él «Johannes Van Eyck estuvo aquí» . Este espejo se une al resto de objetos de lujo y elementos que parecen estar gritando por ser unidos e interpretados, y así ha sido hasta hoy.
Gran cantidad de lecturas se han hecho acerca de esta pieza, pero, a pesar de que tenemos sus nombres, no estamos seguros de que esos nombres sean los verdaderos, tampoco se sabe, por qué están pintados de esta manera y los objetos, aunque perfectamente reconocibles, no es claro por qué son exactamente estos los que aparecen ni por qué están dispuestos de tal manera. De las lecturas más conocidas y aceptadas de la pintura son la de Edward Panosfky y Craig Harbison, ambos historiadores del arte.
La de Panofsky, a grosso modo, se inclina por una escena de un compromiso o un matrimonio que fija una alianza entre dos familias de ricas, esto lo asegura, entre otras cosas, dada la forma en que sus manos se unen; la presencia de Dios representada por la vela en el candelabro sobre la cabeza de Giovanni y el perrito entre los dos que simboliza la fidelidad.
La de Craig Harbison apunta a una lectura del contexto social; así como intereses políticos y religioso de los Arnolfini. Esto lo dice por el rosario que cuelga a un lado del espejo como el deber religioso; la escobetilla que habla sobre los deberes domésticos de la esposa, entre otros elementos.
No obstante, la teoría de Margaret Koster habla de una versión, a mi modo de ver, más interesante: un tributo a la memoria de alguien que ya se ha ido. Koster revisó los archivos de Lucca, la ciudad en la que Giovanni fue mercader, en donde encontró documentos de un tal Giovanni casado con Constanza Trenta, quien murió en 1433, fecha que coincide con un año anterior a la pintura (1434). Esto es un cambio radical a las lecturas que se habían dado. Pues todos los símbolos se remueven.
Margaret dice que una de las razones para creer esto apunta a esa misma vela sobre la cabeza de Giovanni, que se encuentra a plena flama, mientras que la del lado de la mujer, presumiblemente Constanza, se encuentra apagada. Otra indicación de que esto puede ser cierto está en los colores que el pintor eligió: para Giovanni , el negro, un color solemne, lo cual podría indicar un estado de luto, para la mujer son más vivos, blanco, azul y en especial el verde, el cual simboliza el amor.
Asímismo, existe una diferencia en los rostros. Jan Van Eyck es reconocido por ser el pintor de detalle y el realismo, eso se nota en el rostro de Giovanni, quien parece una persona que podrías encontrarte en cualquier lado, además de ser tener un semblante serio y aparentemente triste; mientras que ella tiene facciones sumamente idealizadas, además de un semblante más fresco y bello.
De igual manera, en ese espejo misterioso al final de la habitación hay indicativos del deceso de Constanza. Alrededor de dicho objeto están representadas las escenas de la pasión de Cristo, con una notable distinción: cuando Cristo está vivo se encuentran del lado de Giovanni, mientras que su crucifixión, muerte y resurrección están del lado de ella.
¿Qué sabemos de la muerte de Constaza? La razón de la muerte puede que se haya debido al parto. La investigadora deduce esto a partir de dos puntos, el primero es que a Constanza se le nota el vientre abultado debajo de su vestimenta, y el otro es la presencia de una figurilla de Santa Margarita, patrona de los mujeres en parto, sobre la cabecera de la cama.
En todas las teorías hay una conexión entre los elementos, no obstante, me parece que la teoría de Margaret Koster todos los objetos se unen en armonía, cuentan una historia completa, además… pues soy cursi… bueno no (pero sí). Es una lectura fresca que se aleja de los datos duros de la Historia del Arte, en la que recordamos que, a pesar de tener cuidado con la sobre interpretación de la obra (todo bien documentado), hay algo que siempre nos recuerda nuestra condición emocional. Justo algo que me recuerda a las obras de Boticelli y modelo, Simonetta Vespucci… pero eso ,hijos míos, es otra historia…
Imagen de Arnolfini: https://www.nationalgallery.org.uk/paintings/jan-van-eyck-the-arnolfini-portrait
Reblogueó esto en Gocho Versolari, Obra Poética.
Me gustaMe gusta